La Oreja de Van Gogh
Debo decir que no soy fanático de nada, claro que me gustan muchas cosas, me agradan algunos equipos de fútbol o de béisbol o algunos grupos musicales. Pero antes de agradarme alguno, siempre observo el cómo juegan, cómo se desempeñan en el terreno, cómo actúan ante el rival.
Si son deportes de grupo observo las estrategias, el compañerismo, los valores que se desarrollan en el escenario del juego o deporte, eso me lleva a que me agrade un equipo determinado u otro. Incluso el hecho de por qué hacen lo que hacen y no se dejan llevar por el mercado comercial que les saca de su esencia.
Así la música, me agradan muchos músicos y grupos musicales, escucho de todo excepto el reguetón, que le tengo otras cosas por ahí para comunicar.
En fin, para ir directo al grano que es La Oreja de Van Gogh, es un grupo que desde que lo conocí me agradó mucho, por su estructura musical, la interpretación, la puesta en escena, las letras de sus canciones, no sé, algo me atrapó y me agradó. Generaron una identidad propia en un mercado plagado casi siempre de lo mismo.
Incluso cuando hicieron cambio de vocalista el grupo continuó agradándome. De hecho musicalmente me pareció mucho mejor Leire que Amaia. Cada una tiene una personalidad propia, Amaia es muy buena intérprete y tiene presencia, por su lado Leire, tiene mejor musicalidad, pero ambas son buenas y se complementan bien en el conjunto musical.
Hace poco escuchaba en la radio que quién era mejor si Amaia o Leire, pues eso, yo pienso que cada una es buena en lo que hace a su modo, al final no hay mejor o peor, hay diferencias que se marcan según lo que se interpreta y lo que se siente durante la interpretación.
Ahora en el debate de si estuvo mal o bien el cambio repentino o salida o expulsión de Leire del grupo, no puedo decir nada, no sé la historia, no estoy dentro de lo que ellos están viviendo como individuos y como grupo, solo ellos sabrán las decisiones y lo que realmente sucede en el grupo.
También es difícil sostener un grupo por muchos años, es difícil sacar e innovar con nuevas propuestas, sobre todo en un ámbito que se ha convertido en una industria un poco sucia y desdichada, atendiendo los placeres primero de las marcas o empresas que “patrocinan” a lo que ahora se conoce como industria musical.
Después está cuesta arriba llegar al público y hacer afinidad para que se conceda un espacio de audiencia, ahora la mayoría quieren todo digerido, fácil, superficial, el estilo de música de La Oreja de Van Gogh es un tanto más de compresión y entendimiento.