¡Que te vaya bien!
Es una expresión que pudiera ser comparada con la expresión: ¡Bien!; como respuesta de un: ¿Cómo estás?; es decir, una frase o argumento para salir del paso.
Pero si antes de despedirnos de alguien siempre le deseamos un: ¡Que te vaya bien!.
¿Qué está pasando? ¿Por qué últimamente a pocos les va bien y a muchos les va mal? ¿Qué hace falta para que ese deseo se cumpla?
Quizás son respuestas lógicas, quizás debemos evitar decir: ¡Que te vaya bien!; quizás debemos emprender la meta de iniciar una carrera contrarreloj para que todos los ¡Que te vaya bien! se cumplan por nuestra parte.
Por ejemplo: si tenemos en pleno conocimiento que ¡Que te vaya bien! muchas personas se lo dicen a otras personas, hemos de suponer que cualquier persona que veamos en la calle lleva ese deseo sugerido encima, hemos de suponer que de nuestra parte también depende que a esa persona le vaya bien y así otras personas que nos verán en la calle supondrán que llevamos un ¡Que te vaya bien! colgado de parte de otras personas.
¿Por qué no trabajar en eso? ¿Por qué no hacer que se cumpla el deseo ¡Que te vaya bien!?
Así creo que todos asumiremos una cuota de responsabilidad de dar y recibir, así se pudiera incrementar un poco el bienestar de las personas, así se pudiera incrementar un poco el montículo de paz que tanto hace falta en estos tiempos.
Bueno, gracias por leer y ¡Que te vaya bien!