Lo fácil lo hacemos complejo
A veces lo fácil lo hacemos complejo, pero a veces lo fácil es desconocido y es por esa razón que lo hacemos complejo. Precisamente por nuestra complejidad de creencias aquello que es desconocido lo cuestionamos antes de conocerlo, pese a esto vamos obstaculizando con ideas preconcebidas sin ver que posiblemente eso que desconocemos es tan trivial, tan sencillo, tan simple.
Así me sucede en cada trabajo nuevo que emprendo, lo veo complejo, difícil, inalcanzable; pero a medida que voy descubriendo, leyendo, estudiando, revisando, hurgando entre la telaraña de cuestionamientos o prejuicios que yo mismo interpongo, cuando voy despejando las incógnitas se va tornando un panorama un poco más despejado, más fácil de interpretar, más intuitivo.
No es fácil ser autodidacta, ni es fácil emprender una ruta desconocida cuando andamos solos. Es por eso que se ve difícil y cuesta arriba. Pero a veces lo desconocido es fácil, más fácil de lo que pensamos y sin querer lo hacemos complejo.