El cuatro en el corazón
En el repertorio musical venezolano hay una canción muy querida que no fue compuesta en Venezuela, de hecho quien la compuso es un español que para cuando escribió la letra nunca había pisado suelo venezolano.
Quienes sentimos al país por nuestras venas de igual manera nos sentimos muy honrados por tan bella obra y poesía, y más cuando salimos del país y recordamos todos esos paisajes hermosos, la comida, las mujeres, en fin, tantas cosas que cualquier individuo sentiría al salir de su país natal luego de haber vivido muchos años en él.
Una frase es la que más me marca de esa canción, la que dice: “…y el cuatro en el corazón…”.
Yo había empacado un cuatro en mi corazón pero justo antes de salir, mi hermano me pidió que me llevase su cuatro y ahora lo tengo tanto en el corazón como en mis manos, en esta aventura de vivir lejos de mi tierra, más me acompaña ese entrañable amigo, tanto en las buenas como en las malas.
Hace poco, precisamente mi hermano nos recuerda que él también tiene a su amigo entrañable tanto en su corazón como en sus manos y siente la misma simpatía por él, siente que no lo desampara tanto en las buenas como en las malas, siempre ahí presente, y así muchos de nuestros amigos están en la misma sintonía, armonía y melodía.
