La raza
Hace poco me di cuenta de algo que quizás lo había visto pero no le tomé muy en cuenta, es que las razas a pesar de ser distantes, a pesar de vivir en lugares distintos del mundo, expresan sus emociones de forma similar.
En África las tribus de caníbales extintos ríen igual que los norte americanos, los japoneses sueñan igual que un latino y así sucesivamente, son cosas que pasan en nuestro mundo, cosas que obviamos y no le damos el mayor de los valores porque son actos cotidianos, aún así son sentimientos que no nos separan de el ser humanos y vivir bajo el mismo cielo sobre la misma tierra.
A veces sueño con un mundo sin fronteras, libre del pensamiento, libre de compartir emociones, de llegar más lejos cada día, de ser únicos en el universo, claro, mientras no conozcamos vida en otro planeta.
Pienso que cada día debemos tener más comunicación, entender que mi dolor es el dolor de otro, entender que vagamos en un mundo que no tiene escapatoria más que la muerte, solo permanecer comprendiendo que podemos ser constructores de nuevos continentes, un solo continente, sin el sueño de dominar, solo con el sueño de cuidar y existir, somos una sola raza, la raza humana.