Eslabones
Hace unas horas estuve revisando algunas entrevistas de Juan José Benítez, famoso escritor autor de los tomos Caballo de Troya y una serie de libros supersticiosos, de ficción y misterios. Este revela que es un tanto ermitaño y le incomoda el público, público que lo ha seguido durante un montón de años detrás de sus caballos, tiene pocos amigos, no superan la cantidad de dedos de una de sus manos, pero en algo coincido con él, cada ser humano recorre un camino.
Habla de Jesús de Nazaret como si le conociese enteramente, como si estuvo caminando a su lado, es tan firme su discurso que pudiera tumbar a cualquier religión, menciona que Jesús de Nazaret recorrió un camino distinto al de nosotros porque cada quien tiene un camino diferente que debe recorrer, pues tiene razón, incluso él tiene su propio camino y lo ha aprovechado al máximo, su camino fue hablar de Jesús y crear historias de fantasía quizás.
Finalmente, como he mencionado en varias ocasiones, la verdad absoluta no la posee nadie, ni yo que probablemente esté de algún modo cuestionando los discursos de Benítez, pero detrás de todo el fondo de todo lo que pudiera decirse de los acontecimientos del hombre y la historia, cada comunidad, grupo, religión, tecnología, cada rasgo que integra el hombre común pertenece a una gran cadena entrelazada, cada rasgo es un eslabón donde termina el eslabón de la ciencia comienza el de la fe y viceversa.
